jueves, 22 de marzo de 2012

"Donde tus sueños te lleven"


Muy buenas a todos,

 No sé como conocí a Javier Iriondo, nos encontramos un día por estos mundos virtuales y al momento de hablar con él vi que teníamos inquietudes comunes y pensábamos lo mismo en diferentes temas. Conectamos.

Ayer tuve la posibilidad de estar con él en Vigo, en la presentación  en el Club Faro de Vigo de su libro titulado “Donde los sueños te lleven” un libro que recomiendo a todo el mundo, independientemente del momento por el que esté pasando en la vida. Como decía ayer su presentador y amigo Gabriel, puede que esos 15 euros que vale el libro, "sea la mejor inversión que hayas hecho en mucho tiempo".


Javier habla con el corazón, transmite fuerza y emoción en sus palabras. Habla con la experiencia en de haber llevado una vida intensa, de saber lo que es tocar fondo y de haber resurgido de sus cenizas; de tener esa fortaleza mental para levantarse ante las adversidades, de modificar tus pensamientos y de evitar todo aquello negativo que cada día que tu entorno más próximo te envía y va modificando tu percepción de las cosas. Hay que alimentar el cerebro (enemigo de muchos en estos tiempos de crisis) de cosas positivas, su plasticidad en 8 semanas hace que se modifique.


 Javier  toca esas teclas emocionales que hacen que este libro llegue a la gente. No es un libro de teoría, hablar de algo sin haberlo vivido es algo que la persona a la que se le comunica lo nota en seguida. Es un libro de su experiencia.

  La vida no es racional, la vida se mueve por emociones, y como aquella frase de Nietzsche, y que también se le atribuye a Viktor Frankl, “si tienes un porque en la vida, encontrarás ese como para conseguirlo”, sacarás fuerzas de flaqueza de donde sea para lograrlo. Nadie tiene explicación para esa fuerza interior; en la red se pueden encontrar casos de cómo personas que tenían un porque han hecho cosas imposibles, sobrehumanas.

Ayer en Vigo, habló de tres cosas que me parecen de primera división, básicas. Tres mitos que nuestra sociedad ha conseguido que prioricemos, alejando a las personas de su verdadera esencia interior, de su identidad.

Uno: es que “soy lo que tengo”.  He oído a otras personas decir esto. “Un hombre no son sus cosas”. Porque cuando las pierdes o te las quitan, ¿Quién eres?¿eres la misma persona? Calificamos a las personas por lo que tienen cuando lo material, es solo eso, Material.

Dos: es “soy lo que hago”, y cuando pierdes tu empresa o te echan de tu trabajo, ¿Qué te queda? ¿Acaso eres menos persona? No eres tu profesión.

Tres:  “soy lo que los demás perciben de mi”, Tú no eres tu reputación. Muchas veces proyectamos una imagen errónea por aparentar algo que no somos. Nos pasamos la vida comparándonos, y las comparaciones son fruto de la ignorancia.

Deberíamos responder a tres preguntas para encontrar nuestra verdadera identidad: cuáles son tus valores, como te defines como persona y aprender a oir nuestra voz interior. Lo que importa es tu carácter, que es lo que realmente eres en esencia. Esa esencia da sentido a tu vida, y le dará propósito y significado. El ego, es el verdadero enemigo de la paz interior, nunca tiene suficiente, siempre quiere más y más.

Termino este post, con un texto del libro que me ha parecido inspirador:
 
"A pesar de las desgarradoras circunstancias y de los golpes recibidos,
A pesar del dolor infligido hasta las profundidades del alma,
Aplastado por los acontecimientos y los avatares de la vida,
Desde lo más hondo de mi corazón me niego a abandonar y permanecer en el suelo.
Puede que me llamen iluso, puede que me llamen loco y no esté cuerdo,
Con la incertidumbre, los miedos y las sombras de la duda por compañeros.
Sin importar cuantas veces me caiga o me tiren,
Mirare al frente, me levantaré y seguiré caminando en busca de mi sueño.
Podrán despojarme de todo, menos de mi libertad interior y de mi espíritu.
Puedo perder mis bienes, pero jamás me podrán arrebatar mi patrimonio,
Que son mi honor, mi dignidad y mis sueños, mi verdadero Teroso".




un saludo a todos


Jano

viernes, 9 de marzo de 2012

Hasta siempre amigo


Una llamada teléfono y de repente todo cambia. Silencio. Los primeros minutos tratas de asimilarlo, y te vienen a la cabeza la infinidad de recuerdos y de momentos pasados.

Y la realidad se ve de otra manera, esas tareas de la vida a las que les damos importancia, se quedan en un segundo plano, que es donde siempre debieron estar, y ves que lo importante son otras cosas.

No se cuantos años de amistad, ni cuantos veranos en Areas, veintimuchos, desde que éramos unos enanos. Los tres. Jaime Hermida, tú y yo. Recuerdo aquellos paseos en bicicleta, los partidos de tenis, las acampadas en el jardín de casa, los paseos por el monte. Todo en nuestra playa, en Areas.

Recuerdo el último partido de fútbol que vimos juntos, la final del Mundial de España, en tu casa, celebramos el gol de Iniesta con un grito que se escuchó en todo Areas, aquel gran día que España fue campeona del mundo.

El pasado verano nos dimos unos cuantos paseos en la playa, comentando los posibles fichajes de Barsa, tu ilusión, tu equipo. Te ibas todas las mañanas con mi padre a Sanxenxo a comprar el Sport, te lo leías todos los días, de arriba abajo. El Equipo de Guardiola te ha dado muchas satisfacciones, has visto jugar al mejor Barsa de la historia. 34 años y toda la vida por delante, los que lo conocen sabéis que le sobraba inocencia, que era un pedazo de pan.

Se metió en esto de las redes sociales y se había hecho un facebook creo que hace un mes más o menos. Me comentó algún artículo de los que a menudo suelo colgar.

 Y me saltan las lágrimas con lo que acabo de leer de su último comentario. En mi muro de facebook, el 27 de febrero, en un enlace que colgué. Me escribió esto:


 Soy de los que pienso que la vida hay que vivirla y disfrutarla, día a día, momento a momento y hora a hora, porque no sabes lo que te espera en la otra vida”.


Me quedo sin palabras y ganas de seguir escribiendo.Tienes toda la razón amigo, la putada de la vida, es que muchos nos damos cuenta cuando ya es tarde para eso. 

Sé que donde esté, agradecería estas palabras, como un pequeño homenaje. 
Y espero que allí donde estés, tengan tele para que puedas seguir disfrutando de tu Barsa. En los veranos en Areas, Jaime, yo y mucha más gente, te recordaremos, siempre estarás con nosotros.

Siento no habernos despedido

Hasta siempre Gonza.


Jano